¿Puede un inversor particular ganar a uno profesional?

Posted by on Ago 17, 2015 in Formación Bolsa, Inversión a largo plazo en Bolsa | 16 comments

La respuesta a grandes rasgos es; sí, puede. Aunque sólo sea por estadística. Hay miles de inversores profesionales y millones de inversores particulares, por lo que, inevitablemente, algún inversor particular ganará a un inversor profesional. Pero yendo un poco más allá, ¿es posible que un inversor particular lo haga mejor que la media de los profesionales? Aquí la respuesta es la misma, sí. Aunque no sé exáctamente la rentabilidad media de los inversores profesionales, hay decenas de estudios que demuestran que la mayoría de los fondos de inversión lo hacen peor que el mercado a largo plazo. Por tanto, un inversor particular que simplemente iguale el retorno del mercado (algo que podría hacer con ETFs), ya lo haría mejor que gran parte de los profesionales.

Sin embargo, seguramente haya millones de inversores particulares que, aunque les vaya bien o mal, no saben lo que hacen. De igual forma, hay muchos inversores profesionales que, aunque quizá tengan la capacidad de hacerlo mejor, por el tipo de fondo, por las circunstancias, o por no perder su empleo, tienen que hacer cosas que, a la larga, hacen que sus resultados no sean tan buenos. Para todos estos inversores particulares que no tienen mucho interés en la Bolsa y el análisis, pero sí en conseguir una rentabilidad aceptable, seguramente sea mejor idea centrarse en los fondos y gestores que sí que lo hacen mejor que el mercado a largo plazo (en España tenemos los ejemplos de Bestinver, Metagestión, etc.) y que no tienen los handicaps mencionados. Para los inversores a los que nos gusta aprender más y más sobre inversión y crear nuestra cartera, los buenos inversores profesionales también son una opción de inversión y, además, una buena fuente de información y aprendizaje.

Pero volviendo al asunto. Aunque en muchas ocasiones se ha demostrado que la mayoría de los profesionales no son tan buenos como deberían ser, todavía muchísimos inversores confían en ellos (el problema no es confiar en los profesionales, es confiar en el gran porcentaje de malos profesionales. Por ejemplo, confiar en Bestinver habría sido una idea magnífica). Sin embargo, muchos particulares harían mucho mejor confiando en sus dotes y desarrollándolas, que dejando su dinero a alguien que lo hace sistemáticamente peor que su índice.

En el libro El Inversot Inteligente, Benjamin Graham habla de esto, y Jason Zweig, en sus brillantes comentarios, ahonda en el asunto. El texto a continuación es parte de sus comentarios al capítulo ocho, junto con comentarios míos a lo largo de éste, y se titula:

¿Puede ganar a los profesionales en su propio juego?

Una de las ideas más penetratente de Graham es la siguiente: «El inversor que permita que otros le arrasen a las estampidas o que se preocupe indebidamente por las retracciones injustificadas provocadas por el mercado en sus carteras estará transformando perversamente su ventaja básica en una desventaja esencial».

 

¿A qué se refiere Graham con las palabras «ventaja básica»? Lo que quiere decir es que el inversor individual inteligente tiene plena libertad para elegir si sigue o no al Señor Mercado. Usted puede permitirse el lujo de pensar por sí mismo (cuando preguntaban a Graham qué era lo que impedía tener éxito a los inversres individuales, él tenía una respuesta muy concisa: «la principal causa de fracaso es que prestan demasiada atención a lo que está haciendo el mercado»).

 

El gestor de cartera típico, sin embargo, no tiene más opción que seguir la evolución del Sr. Mercado con todo detalle, comprando a precios elevados, vendiendo a precios bajos, siguiendo de manera prácticamente irracional sus pasos erráticos. A continuación, exponemos algunos de los handicaps con los que los gestores de fondos de inversión y otros profesionales tienen que cargar:

 http://www.forexvirtual.es

 

– Al tener que gestionar miles de millones de dólares, su actividad debe centrarse en las acciones de mayores empresas, las únicas que pueden comprar en las cantidades multimillonarias que necesitan para completar sus carteras. Por lo tanto, muchos de los fondos acaban siendo propietarios del mismo número reducido de gigantes cuya cotización está sobrevalorada.

Peter Lynch, gran gestor, también habla de ello como vimos en la cartera de los niños que bate al mercado. Como dice Lynch, ningún gestor ha sido despedido por llevar IBM en cartera. IBM lleva lustros en las carteras de muchos fondos, y lleva lustros también en los que, a largo plazo, no lo hace mejor que el mercado. Sin embargo, un gestor medio, que lo único que quiere es mantener su trabajo, no tendrá ningún problema por no ganar mucho dinero por llevar sólo las empresas más grandes. Sin embargo, si se equivocase invirtiendo en una empresa menos «famosa», sí que debería preocuparse por su puesto.

Los inversores suelen arrojar más dinero a los fondos a medida que sube la cotización del mercado. Los gestores tienen que emplear ese nuevo dinero para comprar más acciones de las empresas que ya tenían en cartera, con lo que impulsan su cotización hasta niveles aún más peligrosos.

Ya se sabe lo que decía Rockefeller, cuando el limpiabotas me habla de Bolsa, lo vendo todo. Lo curioso es que esto es cierto. En España tenemos un ejemplo claro. Telefónica Móviles salió a Bolsa en plena burbuja, y entró todo el mundo. El resultado no podía ser otro que un fracaso. La empresa salió cara a Bolsa, todo el mundo había comprado y, claro, pasó lo que pasó.

– Si los inversores que han depositado su dinero en los fondos quieren retirar su dinero cuando el mercado pierde valor, los gestores pueden verse obligados a vender acciones para poder atender a esas solicitudes de fondos. De la misma forma que los fondos se ven obligados a comprar acciones a precios sobrevalorados en los períodos alcistas de mercado, se ven obligados a vender cuando las acciones se abaratan.

pánico inversor

Paramés hablaba sobre esto cuando estaba en Bestinver. Decía que antes de explotar la burbuja inmobiliaria, el dinero entraba a chorros en sus fondos, tal y como explica Jason Zweig en el punto anterior, y que, tras la explosión, salió dinero sin parar. También comentaba algo curiso; tras la segunda gran caída en 2011, casi no salió dinero de sus fondos. Según él, los inversores que aguantaron la primera caída ya habían aprendido, y sabían que no era buena idea salir en el peor momento. Por tanto, no cabe duda de que, a veces, los malos resultados no son culpa de los gestores, sino de los inversores particulares.

– Muchos gestores de cartera consiguen bonificaciones si sus resultados son mejores que los del mercado, por lo que se obsesionan en medir su rentabilidad con respecto a referencias como el índice S&P500. Si una empresa se incorpora a un índice, cientos de fondos se lanzan impulsivamente a comprar acciones de la empresa (Si no lo hicieran y las acciones de esa empresa consiguen buenos resultados, los gestores parecerían irresponsables; por otra parte, adquieren las acciones y éstas tienen unos resultados deficientes, nadie les culpa).

 Una buena forma de conseguir que los objetivos de los inversores y los gestores estén alineados es que los segundos también tengan su dinero invertido en los fondos. En varios fondos value españoles, como Metagestión, los gestores tienen parte de dinero en ellos. Estos son los mejores fondos de inversión en mi opinión. De esta forma, los inversores se pueden «asegurar» de que los intereses de los gestores son los mismos que los suyos, y es que el fondo lo haga bien a largo plazo.

– Es cada vez más habitual que espere que los gestores de fondos estén especializados. En la actualidad los gestores de fondos tienen que comprar únicamente «acciones de pequeñas empresas en crecimiento», o únicamente acciones de «empresas con capitalización media» o  «de grandes empresas combinadas». Si una empresa adquiere unas dimensiones demasiado grandes, o demasiado pequeñas, o demasiado baratas, o si llega a ser un poquito excesivamente cara, el fondo tendrá que desprenderse de las acciones, aunque al gestor le encante la empresa.

 No tiene mucho sentido comparar los resultados de un fondo de inversión que se centra en empresas agrícolas con la evolución del índice chino. Si un gestor sólo puede invertir en empresas agrícolas, lo lógico es que se le compare con un índice de éstas.

Por lo tanto no hay ningún motivo por el que usted no pueda tener unos resultados tan satisfactorios como los de los profesionales. Lo que no podrá hacer usted (a pesar de todos los presuntos expertos que le digan que sí puede) es «ganar a los profesionales en su propio juego». Ni siquiera los profesionales pueden ganar en su propio juego. ¿Por qué iba a querer usted jugar a ese juego, para empezar? Si sigue sus reglas, acabará perdiendo, ya que al final acabará siendo esclavo del Señor Mercado, al igual que lo son los profesionales.

 inversor-particular

Lo que debe hacer, al contrario, es caer en la cuenta de que invertir de manera inteligente consiste en controlar lo que se puede controlar. No es posible controlar si las acciones o los fondos que compra van a tener mejores resultados que el mercado hoy, la semana que viene, el mes que viene, o este año; a corto plazo, su rendimiento siempre será rehén del Señor Mercado y de sus caprichos. Lo que sí puede controlar usted es:

 

Los costes de intermediación, si hace operacines con poca frecuencia, de manera paciente, y de forma barata.

 

Sus costes de cartera, si se niega a comprar fondos de inversión que tengan unos gastos anuales excesivos.

 

Sus expectativas, si actía con realismo y no se deja llevar por las fantasías a la hora de hacer previsiones sobre los resultados que puede obtener.

 

Su riesgo, si decide qué parte de su patrimonio total queda expuesto a los azares del mercado de valores, mediante la diversificación y mediante los ajustes de la cartera.

 

Su factura tributaria, si conserva las acciones durante el periodo necesario para reducir al máximo sus obligaciones tributarias, atendiendo a la normativa fiscal que se encuentre vigente en cada momento.

 

– Y, en general, su propio comportamiento.

Conclusión:

Yo creo firmemente que un inversor particular puede hacerlo mejor a largo plazo que gran parte de los inversores profesionales. Aunque estos últimos cuentan con más recursos y, según los casos, más experiencia, formación y conocimientos, también juegan con varios handicaps que un inversor particular no tiene, como hemos visto. Esto no quita que haya ciertos profesionales que tengan resultados extraordinarios de forma sostenible y que merecen toda la atención posible para aprender de ellos, y un gran reconocimiento. Aun así, un inversor particular formado e informado puede hacerlo realmente bien a largo plazo.

Por otro lado, para un inversor particular que no quiere preocuparse aprendiendo a invertir por su cuenta, seguramente dejar el dinero en manos de un profesional sea mejor idea, eso sí, haciendo un trabajo previo para ver qué profesionales lo han hecho bien y tienen una filosofía acorde a la suya.

Por cierto, me voy unos días de vacaciones, así que no podré contestar emails y comentarios, aunque sí que tengo varias entradas programadas para que se publiquen estos días.

Puedes leer el fragmento que viene a continuación en el libro pinchando aquí, puedes leer las mejores citas de El Inversor Inteligente aquí, y puedes comprar El Inversor Inteligente pinchando aquí.

Si te ha gustado este artículo puedes regalarme un click en los iconos de redes sociales de abajo, dejar un comentario, o enlazar a este artículo desde otras webs.

16 Comments

  1. Jo, es que parece mentira que podamos hacerlo mejor que profesionales. Pero cuando lees estadísticas y posts como el tuyo, ¡parece casi hasta lógico!

    Siempre hay excepciones claro. Pero en mi caso, como me gusta invertir por mi mismo y aprender en el proceso, no creo que me anime con invertir en fondos. No lo veo.

    ¡Qué descanses en esas merecidas vacaciones Lancaster!

    • Así es Javier. Yo creo que para un inversor particular con cierta formación y experiencia en Bolsa, y con dos dedos de frente, es posible hacerlo mejor que la mayoría de los fondos. Otra cosa son los gestores tan buenos que tienen algunos fondos que hacen que, en su caso, sea realmente difícil superarlos. De hecho, para los inversores que no tienen ganas de aprender, seguramente sea mejor buscar fondos.

      Gracias Javier. Saludos.

  2. Completamente de acuerdo, lynch lo remarca varias veces en su libro, nosotros podemos permitirnos cosas que un gestor no puede

    un abrazo

    • Aunque también tenemos handicaps, los inversores tenemos algunas ventajas muy poderosas y de las que no siempre somos conscientes. Utilizándolas bien se pueden conseguir muy buenos resultados.

      Un abrazo.

  3. Gran artículo !

    Le voy a dar una paliza al mercado que se va a enterar !!! :)

    Un saludo

    • Esa es la mentalidad jajajaja

  4. Yo diferenciaría entre los profesionales que trabajan para otros y los profesionales «autónomos». Los primeros suelen tener corsés que no les permiten según qué cosas. Por ejemplo, los asesores de los bancos (Banca Privada o Banca Personal de un cierto nivel) ofrecen muchas veces los productos de su entidad, que no tienen por qué ser los mejores.

    Mi opinión es que un inversor particular con un cierto criterio y que opere poco puede tener unos resultados muy interesantes, sobretodo si se mira a largo plazo.

    Un abrazo,
    Czd

    • Efectivamente. Es una división bastante razonable. Como dice Buffett, muchos gestores prefieren y tienen que morir haciendo lo mismo como lemmings para mantener si trabajo.

      Además, también me parece importante que los gestores tengan dinero en su fondo.

      Un abrazo

  5. Todos nosotros invertimos con la esperanza de que un día vamos a tener suficiente dinero para vivir de nuestras inversiones. La pregunta sigue siendo, ¿puede un inversor normal como nosotros realmente ganarle al profesional? ¿Tenemos lo que se necesita para ganar a los intermediarios e instituciones que tienen millones o incluso miles de millones invertidos en el mercado? Muchos de los errores hacen que los inversores principiantes tengan mayor margen de error por tener una falta de comprensión de las desventajas innatas que se enfrentan.

    Para sacar provecho están los Mercado bajista en el que se puede sacar provecho de la situación. A veces Bolsa de valores es una caja de pandora.

    • Seguramente un inversor principiante y sin interés por aprender haga mejor dejando su dinero en manos de buenos profesionales. Sin embargo, en el caso de los inversores con algo de experiencia y que han hecho sus deberes para saber sobre Bolsa, creo que es mejor invertir por cuenta propia, que dejando el dinero a los gestores medios. Si hablamos de los gestores de calidad que lo hacen bien a largo plazo ya es otro asunto.

  6. Este es un asunto interesante, y una de las premisas básicas de todo inversor value. Pero hay tres cosas importantes que me vienen a la cabeza que conviene recordar:

    1 – Sí se puede batir al mercado y a los gestores profesionales, pero no es nada fácil. Hay que dedicar mucho mucho tiempo al análisis de las empresas en las que se invierte. Es decir, si al inversor institucional le cuesta mucho batir al índice, al particular también. Como se dice habitualmente en finanzas «there is no free lunch». Hay que dedicar horas y horas (o semanas mejor dicho) en investigar cada inversión.

    2 – Aunque el inversor particular no tiene las restricciones de un inversor institucional, tiene que afrontar otro tipo de limitaciones. Especialmente los sesgos emocionales y cognitivos. Por ejemplo (hipotéticamente hablando), he invertido en Adidas, pero oye que pasa ahora, ¿porque ese fondo de pensiones está vendiendo toda su posición? ¿Es que tienen información que me he perdido? Uff, la acción cae un 20%, llevo perdidos más de 2.000€… No tengo ni idea de por qué han vendido su participación a estos precios, esta claramente infravalorada ¿o eso creo? ¿Estoy equivocado o se equivocan los gestores del fondo que están vendiendo y el mercado por darles parte de razón? ¿Vendo?
    Cuando una persona se enfrenta a situaciones de estas (y hasta a los más brillantes les pasan [tenemos el caso reciente de Buffet con las petroleras americanas]) el propio inversor es su peor enemigo y el mayor lastre para batir al mercado.

    3 – Por tanto, se requiere mucha autodisciplina y trabajo para ser un buen inversor particular. Si no se tiene esto, aunque recomiendas invertir en fondos de inversión, yo no estoy de acuerdo con esto. En España, a lo largo de plazos de 10 años, menos de un 10% de los fondos consiguen batir al índice de referencia con el cual se comparan (y los que lo hacen por los pelos). El cliente, en vez de gastarse dinero en pagar comisiones a un gestor que casi seguro no sea capaz de batir al índice, es mucho más recomendable ahorrarse esas comisiones (alrededor de un 2% anual) e invertir en fondos pasivos o ETFs indexados que le hagan ganar igual que el índice, y a largo plazo más que con casi todos los gestores. La misma estrategia que ha adoptado Buffet con la fortuna de sus herederos, invertir en un ETF del S&P500.

    Un saludo

    • Hola Arek.

      Con el punto 1 estamos totalmente de acuerdo. En cuanto al 2, también coincido, pero diría que también le afecta a los profesionales. De hecho, me imagino que ellos tendrán la presión de tener que cumplir con unos resultados, que se junta con que, además, cuando las Bolsas bajan muchos clientes deciden vender sus participaciones.

      Sobre el punto 3, yo también creo que invertir en un ETF es muy buena idea para alguien que no quiere preocuparse por la Bolsa. Sin embargo, también pienso que un fondo es buena idea, si nos centramos en ese 10% que lo hace bien. Por ejemplo, en 1990 o en 1995 Warren Buffett ya llevaba muchos años haciéndolo mejor que el mercado. Es cierto que lo suyo no es un fondo, pero sirve para entendernos. Invertir en Berkshire en los 90, después de que Buffett y Munger llevaran muchos años haciéndolo bien, habría sido muy buena idea. Hoy en día tamién tenemos casos de gestores que lo han hecho mejor que el mercado, y que probablemente sigan haciéndolo a largo plazo. Yo creo que, en casos así, es buena idea invertir en un fondo.

      Saludos.

  7. Sí, de 604 fondos quiero recordar que había en España creo que sólo unos 8 mejoraban al mercado los últimos 15 años, y 5 eran de Bestinver…

    En cuanto al artículo, los profesionales tienen handicaps, pero los particulares también, nada más lejos de la realidad, tenemos que pagar impuestos cada vez que vendemos (y los profesionales no), y, para mi, esto es imperdonable al señor Montoro y todos los que ha habido en su cargo anteriormente. Esto me hace vender mucho menos y por tanto tener menos disponible para empresas que creo que están más infravaloradas que otras que ya tengo en cartera y ya subieron lo que tenían que subir. A veces esto me perjudica, y no por miedo al señor mercado, sino por miedo al señor Montoro.

    Un saludo Lancaster,
    http://www.muchoinvertir.com

    • Es un punto importante lo que comentas de los impuestos. Es posible que si fueran menores, o no exisitieran, tuviera sentido realizar más operaciones y hacer una rotación de la cartera mayor. Sin embargo, teniendo en cuenta los impuestos y las comisiones, no parece muy buena idea ser muy activo.

      Saludos.

  8. La respuesta es muy sencilla. Escoge 20 personas al azar, a 10 de ellas les prestas 10.000€ para invertir, de las ganancias se quedan con un 20%. Las otras 10 personas les pides que cojan 10.000€ de sus ahorros y que inviertan por ellos mismos.
    ¿Qué grupo de personas crees que cuidará mejor de los 10.000€ iniciales?
    Repite la operación una y otra vez con grupos diferentes y el resultado será siempre el mismo.

    Ahora escojemos 20 empresas, 10 de ellas dirigidas por los mismos dueños y las otras 10 dirigidas por un grupo de directivos que no son propietarios de la empresa y que no hay un claro propietario de la empresa la cual dirigen ¿os suena de algo? pues solo hay que mirar en el IBEX.
    ¿Que grupo de directivos creeis que gestionará mejor la empresa? ¿Que grupo de empresas estará mejor dentro de 50 años? ¿Lo adivináis?

    • Muy buen enfoque Jorvine, tan bueno, que la respuesta salta a la vista.

      Saludos.

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos necesarios están marcados *