What I learned losing a million dollars

Posted by on Jul 22, 2014 in Análisis fundamental | 4 comments

Hace poco leí un artículo de Gfierro en Rankia con el título, Lo que aprendí perdiendo un millón de dólares«.  Por suerte, el título del post no se basaba en una historia vivida por Gfierro, sino que hacía referencia a un libro escrito por Jim Paul contando su experiencia. El título del libro es bastante explícito y deja bastante claro de qué va el asunto, pero el artículo de Gfierro lo hizo todavía más atractivo para mí. De hecho, me gustó tanto el artículo que compré el libro y en estos momentos estoy terminándolo.

Me está pareciendo un libro realmente interesante, tanto, que he decidido dedicarle también un artículo, sólo que en mi caso, el artículo es simplemente la traducción de una parte del prólogo.

What I learned losing a million dollars, de Jim Paul

 lo que aprendí perdiendo un millón de dólares

La moraleja de la historia que estás a punto de leer (What I Learned Losing a Million Dollars) es: el éxito se puede construir sobre repetidos fracasos, cuando los fracasos no se toman como algo personal; de igual forma, se puede construir el fracaso cuando éxitos repetidos son tomados como algo personal. Thomas Edison fracasó unas 10.000 veces antes de descubrir el filamento necesario para crear una bombilla eléctrica. El día en que su laboratorio en Menlo Park se quemó completamente, un periodista le preguntó qué es lo que iba a hacer. «Empezar la reconstrucción mañana» dijo Edison. En parte, Edison triunfó porque no se tomó los fracasos y las pérdidas como algo personal. Por otra parte tenemos a Henry Ford, que admiró a Edison y trabajó con él. En 1905 Ford comenzó desde la nada y, en sólo 15 años, construyó la que fue la compañía manufacturera más grande y rentable del mundo. Sin embargo, unos años después, la que parecía la empresa más sólida que pudiera existir estaba en problemas y perdería dinero casi todos los años durante dos décadas. Ford era conocido por aferrarse firmemente a sus opiniones. ¿es posible que la compañía perdiera tanto dinero porque se tomara su éxito como algo personal y pensara que no podía equivocarse?

Personalizar el éxito prepara a la gente para un tremendo fracaso. Sucede cuando se comienza a considerar el éxito como algo totalmente personal, un reflejo de sus habilidades en vez del aprovechamiento de una buena oportunidad, estando en el lugar adecuado, en el momento adecuado o, simplemente, tener suerte. Los que toman el éxito como algo personal piensan que su mera intervención en un proyecto garantiza el éxito.

aprender de los errores

Este fenómeno ha recibido mucho nombres: orgullo desmedido, sobre confianza, arrogancia…  pero la manera en la que el éxito se convierte en algo personal y el proceso que precipita el posterior fracaso nunca han sido claramente explicados. Eso es lo que nos disponemos a hacer. Este libro es un caso de estudio de la historia clásica de los emprendedores: la persona que toma riesgos y que ve una oportunidad, la bombilla que se ilumina con una idea, el gran crecimiento casi tóxico, los errores y el colapso. Nuestro caso es el de un trader, pero como en todos los casos de estudio y en las parábolas, las lecciones aprendidas pueden ser aplicadas en muchos otros ámbitos y situaciones. Estas lecciones te ayudarán, ya te dediques a los mercados o a los negocios. Ambas áreas tiene más en común de lo que en principio parece. De hecho, la portada de la revista Forbes de 1993 sobre las 400 personas más ricas de Estados Unidos tenía una frase de Warren Buffett que dice : «Soy mejor inversor porque soy empresario, y soy mejor empresario porque soy inversor«. Si los elementos que permiten el éxito pueden transferirse entre mercados y negocios, también pueden transferirse los de fracaso.

Podríamos estudiar diferentes casos de éxitos para demostrar cómo el éxito se personaliza y como luego llega la caída, pero seguramente recuerdes y aprendas mejor la lección si se presenta mediante anécdotas y es sobre una persona real y su gran pérdida. ¿Cuánto de grande? La caída de una carrera de 15 años y la pérdida de más de un millón de dólares en sólo 75 días.

Conclusión:

La conclusión la dejo para quienes quieran leerse el libro. En mi caso, es un libro que me ha sorprendido para bien. Cuando Gfierro dijo que era el autor era un trader me echó algo para atrás, pero resulta que, a pesar de estar escrito para un trader, es igual de válido e interesante para un inversor fundamental a largo plazo.

Si quieres comprar el libro, puedes hacerlo pinchando aquí.

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4 Comments

  1. Se aprende siempre más de los fallos que de los aciertos. Una regla de oro. Observar los fallos ajenos también es instructivo aunque no tanto como sufrir el hachazo en persona.

    • Desde luego que cuando cometes un error no se te olvida, es una de las fuentes básicas de aprendizaje aunque, como Buffett, prefiero aprender de los errores de otros.

  2. Muy buen post.

    Llevo un minuto por aquí y estás engordando mi lista del verano para bien. Muchas gracias por la aportación.

    Un saludo.

    • A mi me ha gustado bastante y, de hecho, se parece al último artículo que has escrito, aunque también habla de cómo personalizar éxito le llevo a cometer errores.

      Saludos.

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