Las ideas de negocio para emprender

Posted by on Sep 28, 2015 in Emprendedores | 9 comments

Cuando escribí el primer post de este blog tenía un negocio propio. Para entonces, había sido capaz de crear algo que, con una inversión mínima, me daba el dinero suficiente primero, para vivir, y luego, para vivir y pagar alguien para que trabajara conmigo. Aunque el negocio no iba como un cohete, iba bien, y con el tiempo los números eran mejores. Sin embargo, me dedicaba a un sector que no me gustaba por eso, cuando escribí ese primer post en el blog, tenía el negocio en venta. Tres meses después había vendido una parte de la empresa, aunque seguí trabajando en ella por un tiempo.

A día de hoy me alegro mucho de haberlo vendido y de poder haber reconducido mi vida hacia dónde yo quería. Me alegro también de haberme dejado llevar por la obligación y por el sentimiento de que, después de tanto esfuerzo, no tenía sentido abandonar algo que funcionaba.

Sin embargo, cuando por la sangre te corre el emprendimiento, es difícil resistirse a todas esas ideas que te vienen a la cabeza. De hecho, este fin de semana me volvió a subir la fiebre del emprendimiento con una idea de negocio que parecía buenísima y que no podía dejar pasar. Por eso, para resistirme, me viene muy bien el texto que vamos a ver a continuación de El libro negro del emprendedor. Ojo, resistirse sólo si es necesario. Puedes tener cientos de ideas y de planes, pero salvo que sean buenos y los desarrolles bien, mejor que no te lances. Es algo parecido a la inversión en Bolsa; hay miles de acciones diferentes, pero lo mejor suele ser lanzarse a comprar sólo en algunos casos en concreto. Si lo tienes todo atado y bien atado (que cuando te lanzas sueles descubrir que no es así), no hay que tener miedo y hay que saltar con todas las fuerzas.

La patética idea feliz

No hay nada más patético que alguien que te dice: «He tenido una idea de negocio genial, no puedo explicártela porque como me la roben… me muero». Esa persona acaba siempre por explicártela -¡claro que sí!-, pero no sin antes (y esto es lo más patético de todo) hacerte jurar y perjurar que no vas a decírselo a nadie.

 

A éstos yo los llamo «emprendedores Gollum», como en el Señor de los Anillos («¡Mi tesoroooo! ¡Mi tesoroooo!»). Son emprendedores muertos antes de empezar. Por suerte muchos de ellos no llegan nunca a poner en marcha su negocio, porque los que lo intentan, en su gran mayoría, fracasan.

 

Recuerdo una ocasión en que me llamó un conocido porque quería citarse conmigo para explicarme una idea de negocio que había tenido con su mujer. Yo, acostumbrado a tales pérdidas de tiempo, le pedí que me avanzase desde el otro lado de la línea de qué se trataba para determinar, le dije, si era un producto o industria en la que yo tuviese experiencia; así, pensé, podría sacármelo de encima sin perder demasiado tiempo. Pero como suele suceder en estos casos, la persona en cuestión se negó a explicármelo por teléfono. Me dijo que era demasiado confidencial y que, además, tenía que verse, que si no lo veía no lo entendería.

idea nueva

Además de tener que darle hora a una persona que se negaba a decirme para qué quería verme, tuve que dar mi palabra de que mantendría en secreto su gran idea, y debía saber que -¡afortunado de mí!- si accedía a explicármela era porque me consideraba digno de su confianza. Vamos, que se daban todos los indicios de un disparate empresarial.

 

Al cabo de dos semanas apareció el «emprendedor» con su mujer y me mostraron un concepto que se llamaba «risa total», y que consistía en discos con grabaciones de risas de niños pensadas para ponérselas a los bebés cuando estaban en la cuna tratando de dormirse, ya que estaba demostrado por no sé qué psicóloga francesa que de esta forma se favorecía el desarrollo de un carácter optimista. Casi me echo a llorar. En fin…

emprendedor-camino

En otra ocasión vino a verme otro conocido que me habló de un producto con el que iba, literalmente, a forrarse. En breve iba a surgir una ley que obligaría a los parvularios y jardines de infancia a instalar dispositivos para evitar que los pobres infantes se pillasen los dedos con las puertas de la escuela. Mi amigo, diseñador industrial, había pensado en una puerta con el canto redondo y estaba dispuesto a dejar su trabajo para entregarse a la producción y distribución de puertas de canto redondo para guarderías, las cuales, obligadas por ley, no tendrían más remedio, cual monopolio del pasado, que sucumbir ante su producto.

 

En este caso, tenía suficiente confianza con la persona y le dije: «¿Puertas de canto redondo? Creo que con este negocio vas a pillarte los dedos».

 

Deje de pensar en ideas, y céntrese en las oportunidades: «Más que de idea, yo hablaría de oportunidad. Una oportunidad puede basarse en una nueva idea o en una idea ya existente pero que se puede ejecutar de forma diferente. O de igual forma, pero en un lugar distinto. En todas estas situaciones uno puede tener éxito o puede fracasar. Todo depende de la manera como se ejecute el proyecto. Sin embargo, creo que desarrollar una oportunidad basada en una idea ya existente reduce el riesgo, ya que cuentas con más información de partida.»

En mi caso, mi negocio no era nada nuevo, simplemente me dediqué a hacer algo en lo que ya había muchas empresas desde hace mucho tiempo (no, no era un bar). Simplemente traté de hacerlo mejor y ofrecer algo nuevo que me diferenciara, especialmente al principio, cuando nadie va a contratar una empresa que nadie conoce, en lugar de una empresa grande y asentada de confianza. Por eso, durante los primeros meses ofrecí un servicio extra que las demás empresas no tenían, para conseguir mis primeros clientes y buena reputación.

O sea, que un emprendedor es un tipo con el afán del bombero, pero sin ideas de bombero. Y es que únicamente un infeliz confía sólo en su idea feliz.

Conclusión:

Con este texto  de Fernando Trías de Bes no pretendo desanimar a quienes, como yo, tienen el emprendimiento en la sangre. Al revés, cuando emprender se convierte en una necesidad por tu personalidad, yo creo que, antes o después, hay que hacerlo. Eso sí, con cabeza y sabiendo lo que hacemos. En cuanto a las ideas brillantes que todos tenemos de vez en cuando, es mejor ponerlas en perspectiva antes de meternos en el jaleo y problemas que supone emprender.

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9 Comments

  1. Muy buen consejo, todos tenemos 10 ideas de bombero al día… menos mal que se pasa rápido!

    Al final tanto pensando en los negocios que dirigen los demás que es inevitable que se te venga a la cabeza dirigir el tuyo propio, y sin duda es algo que bulle en la sangre y que no hay forma de quitarse de encima!

    • Así es. Al final, muchos a los que nos gusta el mundo de la inversión y el value investing, tenemos ese impulso emprendedor tan difícil de controlar. Yo creo que es algo muy bueno, si se tiene cabeza.

  2. Me siento identificado con lo que hiciste. Yo también tengo negocio propio pero hay parcelas del mismo que no me agradan. Llevo en mente intentar dar un giro a mi vida consiguiendo nuevo negocio (del que me gusta) e ir vendiendo lo que no me gusta. Tengo la suerte de que puedo ir dando el paso poco a poco porque es mi know-how la base del mismo y no necesita gran inversión (creo).

    Saludos

    • Tengo un amigo que antes de casarse quiere planificar su divorcio de la mejor forma posible, es decir, quiere saber cómo protegerse ante un ex-cónyuge enfurruñado. No porque se quiera divorciar, sino porque estadísticamente todos tenemos muchas papeletas y él no es ajeno a ello.
      Así que ahí te dejo una idea de nicho de negocio en tu ámbito, impuestosindependenciafinanciera, por si te interesa.

      Un abrazo

    • ¡Qué interesante! Lo tuyo es de valiente, porque yo, tras vender mi negocio, necesité un periodo de tiempo para coger fuerzas. Una vez recuperado, ya tengo la cabeza dando vueltas otra vez. ¡Mucha suerte con el proceso de cambio!

  3. Hola,

    Creo que tener un negocio propio es para algunas personas fuente de motivación, y la motivación lo es todo. Ganar 3000 euros al mes en una oficina de una multinacional puede ser tan desmotivador como motivador puede ser ganar 400 con un negocio propio que hayamos emprendido desde cero.

    Yo emprendí también un negocio relacionado con un trabajo que tenía. Era demasiado grande, y yo demasiado pequeño, así que el negocio no prosperó, pero eso me abrió las puertas a otras cosas, y es que la vida está llena de oportunidades. Y además me quité la espinita, y, como tú dices, seguro que lo vuelvo a intentar con otra cosa.

    De hecho con otro asunto, muchísimo más poca cosa, lo he intentado a la par que mi trabajo principal, y no va del todo mal.

    Un abrazo,
    Mucho Invertir

    • Se lo comentaba a David, y es que es curioso la cantidad de inversores B&H/Value que estamos dentro del mundo del emprendimiento. Buffett dice que él es mejor inversor gracias a que es empresario, y creo que hay parte de cierto en eso.

      Yo creo que quitarse la espinita es importante. Se suele decir que es mejor arrepentirse de lo hecho, que de lo que no has hecho. En los últimos años de mi vida, no me gustaría pensar en lo que podría haber hecho y no hice, sino que me gustaría mirar atrás y ver que lo dí todo, y que hice lo que quise, independientemente del resultado.

      Un abrazo.

  4. Buenas tardes (desde atlanta) Lancaster

    Te sigo, casi siempre en silencio, desde hace tiempo. He leido hoy que Ralph Lauren va a ser sustituido como director de la firma a partir de Noviembre, aunque se queda como director creativo. ¿Qué opinión como inversor te merece este cambio de liderazgo?

    A) Claramente bueno, la empresa necesita un nuevo capitán general para los nuevos tiempos y Ralph se queda cerca para controlar.

    B) Crees que es un error ya que Ralph Lauren lo ha hecho muy bien los ultimos 50 años y ya se han tomado decisiones (reducción de costes) para atajar el problema actual.

    C)Te reservas la opinión por el momento para un fururo artículo.

    Yo llevo dias pensando en aumentar posiciones en esta empresa vs comprar alguna pequeña posición en España ahora que estamos de rebajas. Claro que tambien puedo esperar porque da la sensación de esto no ha acabado.

    Un saludo y enhorabuena, como siempre.

    • Hola Álvaro.

      Se nota que me lees porque en tu comentario das las respuestas que tengo en la cabeza. Mis respuestas son la A y la C. De todas formas, estoy leyendo e invetigando para aprender más cosas del nuevo CEO, y tomar una decisión con fundamento. Es posible que mañana, o en menos de una semana, cuando tenga la información suficiente, publique un artículo comentándolo.

      Saludos.

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