Inversores de Telefónica: Ono, Vodafone y Liberty Global.

Ante la posible OPV de Ono o su venta a otra empresa, están saliendo muchos interesados e informaciones en los últimos días. Según las últimas noticias, Vodafone y Liberty Global son los mejores posicionados para una posible compra de Ono, hecho que podría afectar a Telefónica.

Un inversor de Telefónica preocupado por su empresa, estará al tanto de la pérdida de clientes de su empresa en España. No vamos a entrar ahora a estudiar a qué se debe, pero sí vamos a ver brevemente qué puede pasar según quien sea el comprador de ONO.

En  mi opinión, el peor escenario para un accionista de Telefónica es que Vodafone se hiciese con Ono. Hasta ahora, Vodafone compite con Telefónica principalmente en móviles. Aunque Vodafone también tiene otros servicios como telefonía fija o internet, es en móviles donde es más fuerte.  Por otra parte, Ono es una empresa «cablera», es decir, propietaria de redes, algo que Vodafone ahora mismo no tiene. Hasta ahora, Ono ofrecía fibra óptica, televisión, telefonía móvil y fija.

En el caso de que Vodafone adquiriera Ono, las famosas «sinergias» serían muchas. Además, la oferta Vodafone podría ser mucho más amplia y de más calidad.

Hasta el momento, Telefónica se aprovechaba de ser la propietaria de las redes y de ser la única que puede tener una oferta integral como es Movistar Fusión, que ha supuesto un gran éxito para la compañía. Vodafone y otras compañías han tratado de replicar Movistar Fusión, pero con resultados notablemente peores, entre otras cosas, por la incapacidad de igualar la oferta de Telefónica. Sin embargo, con la adquisición de Ono, Vodafone tendría la capacidad e independencia para ofrecer cualquier tipo de servicio convergente y de hacer todavía más dura la competencia con Telefónica.

En el caso de que finalmente Vodafone se hiciera con Ono, ésta no sería una noticia desastrosa para Telefónica y sus accionistas, pero sí podría afectar en parte a la rentabilidad o a la cantidad de clientes de la compañía en España.

En el supuesto que fuera Liberty Global quien comprara la empresa, me aventuraría a decir que no habría gran impacto sobre Telefónica. Quizá, Ono tendría la posibilidad de obtener una mejor financiación y la inversión aumentara durante un tiempo y, por tanto, la presión con Telefónica sería mayor, pero es algo imprevisible por el momento.

Si finalmente se produjese un OPV de Ono, habría que estudiarla con detenimiento aunque, a priori, diría que no cambiarían mucho las cosas con respecto a cómo están ahora. En cualquier caso, es posible que, como las otras compañías del sector, Ono ofreciese un dividendo atractivo y por encima de la media del mercado.

Conclusión:

Si finalmente Vodafone comprase Ono, es posible que Telefónica de España siguiese sufriendo en el mercado nacional y, aunque tuviese un competidor menos (Ono) se encontraría con un competidor antiguo con mucha más fuerza (Vodafone).